Cómo llevar a un perro en bicicleta

Conocé cuáles son los accesorios y el adiestramiento necesario para que tu mascota pueda acompañarte a pasear en bicicleta de forma segura.

Si disfrutás de andar en bici, es probable que con la llegada del clima primaveral empieces a salir más seguido. ¿Te gustaría pasear con tu mascota mientras pedaleás? ¡Es una muy buena idea! Sin embargo, para poder hacerlo, tenés que enseñarle a caminar a tu lado o equiparte para cargarlo. ¿Cómo llevar a un perro en bicicleta o acostumbrarlo a correr cerca de las dos ruedas? Algunos consejos salir en bici acompañado de tu mejor amigo perruno.      

¿Cómo llevar a un perro en bicicleta?

Para llevar a un perro arriba de la bicicleta es fundamental contar con los accesorios específicos que permitan transportarlo de forma cómoda y segura. Para los perros grandes existen remolques especiales. Los perros más pequeños pueden usar un arnés que los mantenga sujetos y evite que salten o caigan de la bici. En este caso, pueden ir dentro de una caja o canasta, siempre que sea estable y estén protegidos del viento y otros elementos. Además, tu mascota tiene que acostumbrarse a la bici, comenzando con paseos cortos y tranquilos para que se familiarice con la experiencia. Dale agua para mantenerla hidratada y hacé paradas regulares para que pueda estirar las patas y descansar.

Adiestrarlo para correr a tu lado

Otra alternativa es pasear con tu perro al lado de la bici o hacerlo correr mientras entrenás en las dos ruedas, pero esto requiere de un adiestramiento especial. El primer paso es que la mascota vaya tomando confianza con ese “objeto desconocido”. En las primeras salidas de enseñanza, no empieces directamente enganchando la correa a la bici. Seguí estas recomendaciones para aprender cómo llevar a un perro en bicicleta:

• Al principio, andá a pie y empujá la bicicleta, ubicándola entre tu perro y vos.
• Que tu perro se siente y espere la señal para iniciar la marcha.
• Ubicá a tu perro alejado del tránsito y circulá por lugares tranquilos. 
• Nunca enrolles la correa en el manillar de la bicicleta.
•  El perro debe ir con la correa distendida y caminar siempre en línea con el sillín.
•  De vez en cuando, cambiá la dirección y el ritmo. Si parás, dejá que se siente.
• Cuando estos ejercicios estén bajo control, podés pasar a la siguiente etapa. 
• ¡Ya podés sentarte en la bici y comenzar a pedalear despacio!
• Probá hacer algunos giros y saltear pequeños obstáculos. 
• Cuando estés completamente seguro de que tu perro sigue bien las instrucciones, podés aumentar la dificultad de los recorridos.
• Aumentá la velocidad y duración de los paseos poco a poco. 

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